2.08.2010

El alma de Paul Giamatti


Quizás ni el mismo Paul Giamatti se acuerde de su cameo en Singles, del cuarto de control en The Truman Show o del campo de batalla en Saving Private Ryan. De hecho, tal vez nadie lo recuerde porque en esos días uno no andaba buscando a Paul Giamatti. Todo eso cambió con el Bob Zmuda que Giamatti nos dio en la maravillosa Man on the Moon. De pronto tuvimos un amigo nuevo, un tipo medio calvo y con barriga, la clase de persona en la que se puede confiar. Luego, la consagración: American Splendor (2003) y Sideways (2004). Say no more.

Paul Giamatti es desde entonces un personaje en sí mismo. Inseguro, mal genio, inteligente, como arrepentido de todo lo que dice pero bien parado cuando tiene que fajarse con la gente que quiere abusar de él. Por eso, no se me ocurre mejor persona para Cold Souls, en la que Paul Giamatti hace de Paul Giamatti y lo hace como solo Paul Giamatti podría hacerlo.

Lo encontramos ensayando la obra El tío Vania, de Chéjov, Giamatti tiene el papel principal y las cosas simplemente no le están saliendo. Paul está down y su agente le recomienda un artículo que apareció en el New Yorker como la solución a todos sus problemas. Pues bien, el artículo es sobre una empresa que permite a sus clientes almacenar y conservar sus almas en frío, para vivir un poco más ligeros durante el tiempo que ellos consideren prudente. Al parecer, cuando uno se separa de su alma, todo es más fácil. Giamatti sabe que lo que está a punto de hacer es una locura pero, desesperado como está, siente que las cosas no podrían ponerse mucho peor. Y se equivoca. Un actor sin alma no tiene materia prima para trabajar y de pronto es una persona frívola y superficial que no tiene nada que hacer en una obra de Chéjov. Entonces pide un alma que no sea la suya y elige la de un poeta ruso. Giamatti, el actor, es un éxito. Giamatti, el personaje, está peor que al principio, atormentado por un alma más grande que el cuerpo que pretende sostenerla.


Todo lo que Giamatti quiere es que le devuelvan su alma, bancársela consigo mismo como hacemos los mortales y seguir viviendo. Pero su alma ha sido vendida en el mercado negro (comercializada como el alma de Al Pacino) y ahora le pertenece a la esposa del capo de una red de traficantes de almas, una rubia estrella de telenovelas rusas. Para recuperarla, Giamatti se alía con una mula de almas y viaja de Nueva York a Moscú en una misión casi suicida.

Ahora que lo escribo, pienso que la trama de Cold Souls da tranquilamente para una comedia. Pero no. En todo caso, la primera película escrita y dirigida por Sophie Barthes (nacida en Francia y criada entre Oriente Medio y Sudamérica) es una tragicomedia que, claro, le rinde tributo a Chéjov, pero también a gente más joven como Cortázar, Paul Auster o el mismo Charlie Kaufman. Es, en rigor, una película de ciencia ficción, de esas que nos hacen creer que el futuro ya llegó. No es perfecta (la gran Emily Watson, por ejemplo, está desperdiciada), el tercer acto es un flash informativo y tal vez sería insostenible si Giamatti no fuese Giamatti, pero tiene voz, tiene a David Strathairn, tiene la inolvidable Pa’llegar a tu lado de Lhasa De Sela, se la juega por eso en lo que cree y nos da un pase backstage hacia el alma retorcida, oscura y amable de uno de los mejores actores de nuestro tiempo.







3 comentarios:

Kros dijo...

Que tal bro......

A mi me gusto mucho su papel en El Iusionista, es cierto a hecho cameos a veces imperceptibles. Esa trama de perder el alma me trajo a la memoria el capítulo de lso Simpson en el que Bart vende su alma, para mi de los mejores capítulos de la serie por no decir el que mas me gusta.

El viernes entro al quirofano amigo si todo sale bien nos estaremos escribiendo y opinando en tu página a partir del 22 de este mes..... ojala escribas algo mas esta semana.

Los que les interese ver nuevamente el capitulo en mención

Bart sell his soul
Temporada 7
Episodio 132

Bye

Juan Fernando Andrade dijo...

Kros,

el tiempo no me da para escribir algo más esta semana, pero ahí dejé un video d Los Pescados que se deja ver y oír.

todo lo mejor en estos días, bro. espero q tu intervención no sea más q rutina y t tengamos d vuelta muy pronto.

gran abrazo

aguante!!

-José Antónimo- dijo...

Lhasa murió el 1ro de Enero, según entiendo había tenido cáncer.

:(